¿Coche eléctrico, quizás? ¿Coche eléctrico, por qué no? La comunidad entera se encuentra inmersa en el debate que está cuestionando cada uno de los conceptos que solíamos conocer. La llegada de la movilidad eléctrica ha generado dos corrientes de pensamiento. Algunas marcas apuestan completamente por la electricidad, mientras que otras adoptan un enfoque más pausado, e incluso algunos analistas consideran que algunas van demasiado despacio. Toyota pertenece a este último grupo. El gigante automovilístico mundial no teme mantener su estrategia actual, más bien se enorgullece de ello.
A la cabeza de la corporación se encuentra Akio Toyoda, una de las voces más importantes y relevantes en la industria y uno de los mayores críticos de la estrategia eléctrica acelerada de la industria. Aunque los japoneses se han visto obligados a ajustar su planificación, tienen la esperanza de lanzar 30 modelos eléctricos en todo el mundo antes de que finalice la presente década. Su enfoque es integral y multidisciplinario. No se limitarán únicamente a los coches eléctricos, ya que la familia estará compuesta por diversas unidades, incluyendo automóviles de combustión y los más modernos y prometedores coches de hidrógeno.
De acuerdo con sus últimas declaraciones, Toyoda sostiene que el coche eléctrico no será la fuerza dominante en la industria. Aunque prevé un rápido aumento en las ventas, estima que eventualmente se estancarán en torno al 30% de cuota de mercado. Esta perspectiva choca con la visión general de la industria, aunque algunas marcas ya anticipan desafíos en el horizonte electrificado. Marcas como Audi han optado por una estrategia más pausada ante la previsible desaceleración del mercado, y las proyecciones para 2024 no son muy alentadoras.
Akio Toyoda ha expresado su opinión en varias ocasiones. Recientemente, el CEO de Toyota ha planteado una pregunta al mundo: ¿por qué elegir entre ICE y EV cuando se pueden tener ambos? Insiste en que no todo tiene que ser blanco o negro; hay una amplia escala de grises que podría ser la solución de movilidad para todos. Toyota continuará desarrollando sus motores de combustión y sistemas híbridos, considerados como los impulsores reales del cambio de paradigma. Los millones de híbridos de Toyota han contribuido más a la movilidad sostenible que cualquier otra tecnología.
Las cifras respaldan la estrategia de Toyota, ya que sus ventas alcanzan niveles récord y sus híbridos se sitúan en los primeros lugares de las listas de ventas. Actualmente, no ven la necesidad de cambiar su enfoque, pero son conscientes de que la situación puede cambiar rápidamente. Ante la tendencia general hacia los vehículos eléctricos, Toyoda estima que el 70% restante del mercado seguirá siendo para los híbridos. Considera que hay diversas opciones disponibles y que no es necesario depositar todas las esperanzas en una única tecnología. Toyota ha afirmado repetidamente que ingresarán masivamente al mercado eléctrico cuando este esté maduro.
La compañía japonesa no tiene planes de participar en la competición de coches eléctricos económicos, aquellos que cuestan menos de 25.000 euros. Argumentan que, en la actualidad, la tecnología necesaria para hacerlos viables aún no existe. Simultáneamente, la empresa está trabajando en el desarrollo de nuevos sistemas, especialmente baterías LFP con más de 1.000 kilómetros de autonomía y baterías de estado sólido. Aunque se consideran la gran esperanza de la movilidad eléctrica, actualmente son más rumores y aspiraciones que realidades. Toyota planea comenzar a utilizarlas a finales de la década actual, pero de manera limitada debido a sus altos costos de producción. La producción en masa, aceleración y reducción de costos determinarán cuándo estas tecnologías se implementarán de manera más extensa, aunque aún no se tiene una fecha precisa para ello.